La profesora de la Escuela de Pedagogía PUCV y doctora en Lingüística, Katherine Malhue, dictó una clase para estudiantes de primer año de la carrera de Psicología en el Campus Sausalito de la PUCV.
Titulada “El enfoque de género en la formación de pregrado”, la clase presentada por la profesora Malhue, tuvo como fundamento su proyecto de investigación: “Percepciones de los y las educadores de párvulos en formación de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso sobre el enfoque de género”, trabajo desarrollado para la Unidad de Mejoramiento de la Docencia Universitaria (UMDU).
“El objetivo de dictar esta clase especial fue visibilizar y movilizar las creencias y percepciones sobre el enfoque de género de los estudiantes de pregrado de la asignatura Historia de la Psicología. Esto, a propósito, de que, los estudiantes trabajaron con el instrumento que diseñamos para el proyecto UMDU”, explicó la profesora de la Escuela de Pedagogía PUCV, Katherine Malhue.
“Quienes se relacionen con niños deben prestar especial atención a sus interacciones. Las prácticas pedagógicas están moldeadas por las creencias que el profesor posee previamente a su formación profesional. Estas pueden impactar en los procesos de aprendizaje, disminuir los niveles de autonomía, liderazgo y participación, el desarrollo de autoestima y decisiones vocacionales de las niñas y niños”, apuntó la docente PUCV.
A la jornada asistieron más de 120 estudiantes, pertenecientes al primer año de la carrera de Psicología PUCV, quienes participaron activamente de la actividad. En esa línea es que interactuaron, preguntando y reflexionando sobre sus experiencias personales y compartiendo sus percepciones, conocimientos bases y contenidos teóricos abordados sobre la temática del enfoque de género.
“Sí reconocemos que el sistema educativo es uno de los principales espacios de socialización de las personas desde sus primeros años, la relación entre la construcción de la identidad de género y la educación son inherentes. En suma, los espacios educativos cumplen un rol preponderante en la construcción de identidades y atributos diferenciados para hombres y mujeres, delimitando normativamente lo que se considera apropiado, permitido y valorado para cada sexo”, concluyó Katherine Malhue.
Por Lorena Mancilla
Escuela de Pedagogía
