La música antigua y colonial revive a través del rescate histórico que representa el lanzamiento del disco “Diálogo entre mundos”, trabajo realizado por la Orquesta Barroca de Valparaíso y financiado por el Fondo para el Fomento de la Música Nacional, Convocatoria 2022, del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Región de Valparaíso.
La producción discográfica será presentada el viernes 17 de marzo, a las 19 horas, en la Sala Margot Loyola del Instituto de Música de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (Pilcomayo 478, Cerro Concepción, Valparaíso), con entrada liberada y sin inscripción previa.
Bajo la dirección de la destacada clavecinista Cristina Gutiérrez Campos, este disco es fruto del proyecto “Orquesta Barroca de Valparaíso: Arreglo, Interpretación y Registro de obras de María Antonia Palacios (1790)”, y se debe al descubrimiento del Libro Sesto que realizó el musicólogo Guillermo Marchant en la década del setenta, entre los escombros desechados por la Iglesia Recoleta Franciscana.
Cabe destacar que en el manuscrito se pueden encontrar 165 composiciones, muchas de ellas dedicadas al órgano e instrumentos de tecla, siendo una fuente única para el estudio de la música instrumental de uso profano en Chile durante el Siglo XVIII.
MÚSICA Y SOCIEDAD
Desde su descubrimiento, a fines del siglo XX, las hipótesis sobre la naturaleza de la autoría y uso del Libro Sesto de María Antonia Palacios han enriquecido el enfoque sobre lo que se había considerado música colonial, desvelando relaciones musicales inusitadas entre la península y la América española.
El Libro Sesto contiene obras de compositores peninsulares que formaron parte de la institucionalidad musical del antiguo régimen, tanto de maestros de capilla como de organistas. Muchas de estas obras fueron dedicadas al órgano, pero también ejecutables en el clave y en pianoforte, e incluye géneros como el Divertimento, la Sonata y danzas como el Minuet. Las piezas, al ser interpretables en diversos instrumentos de tecla, aumentaron su posibilidad de ejecución y circulación. Esta flexibilidad los hacía parte de espacios domésticos como sacros, y permitió que nombres como Juan Capistrano Coley, Juan de Lambida y Vicente Castillón pudieran ser conocidos por los súbditos de la corona en latitudes tan lejanas como las de Chile a fines del siglo XVIII.
LA ORQUESTA BARROCA DE VALPARAÍSO
La agrupación nació en 2018 como fruto del trabajo de su directora, la clavecinista Cristina Gutiérrez Campos, académica del Instituto de Música de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, quien compone el conjunto junto a sus integrantes Florencia Bardavid, en viola da gamba; Fabiola Paulsen, en violín barroco; Javiera Portales, en traverso barroco; y el arreglista Erik Marroquín, en guitarra barroca.
La propuesta artística del ensamble plantea una revisión de una selección de obras del Libro Sesto desde una perspectiva históricamente informada y creativa, ya que son arreglos en el marco estilístico del siglo XVIII. El disco entrega una visión renovada de lo que significa la expresión musical y artística en diálogo como la musicología histórica.
La interpretación equilibra la conducción de las voces en el registro soprano, hechas por el violín y la flauta, con una propuesta de continuo diferente, que contiene la fuerza de la guitarra, la elegancia de la viola da gamba y la sobriedad del clavecín.
Instituto de Música