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Arnaldo Valsecchi, cineasta italiano

“Representa a las mujeres que han perdido alguna ilusión en el camino”

Durante la tercera sesión del ciclo "Conversa conmigo…" los espectadores pudieron interactuar en vivo con el director de cine y televisión para conocer detalles de la filmación de la película "Calzones rotos".

Arnaldo Valsecchi es un ciudadano del mundo: nació en Bérgamo (Italia), luego se trasladó con su familia a Buenos Aires y en 1976 decidió establecerse en Chile, donde instaló su empresa productora de cine. En un comienzo realizó diversos documentales hasta que, en 1995, presentó su primer largometraje "La Rubia de Kennedy". Posteriormente hizo la serie "Cuentos Chilenos" para TVN. Presidió "Factoría", un consorcio de empresas chilenas de producción audiovisuales y, junto a Silvio Caiozzi y Ricardo Larraín, crearon la "Fundación Imaginaria", con el fin de reunir recursos para seguir haciendo cine.

El realizador fue el tercer invitado al ciclo "Conversa Conmigo: el público es protagonista", impulsado por la Cineteca PUCV en esta pandemia, con el fin de acercar al público a los realizadores. En este caso Valsecchi escogió la cinta "Calzones Rotos".

El largometraje fue una co-producción chileno-argentina estrenada en 2018 y cuenta la historia de una familia chilena que se reúne en torno a Matilde, la matriarca, en sus últimos días de vida, quien en sus confesiones al cura del pueblo le dice haber asesinado a su marido. El elenco reúne grandes actores, como Gloria Münchmayer, Patricio Contreras, Catalina Guerra, Julio Jung, Jorge D'Elia, entre otros, quienes dan vida a los personajes en dos épocas de la historia. Esta película fue exhibida en certámenes audiovisuales como Sanfic, Hispanic Film Festival (Sudáfrica), "Festival de Cine Iberoamericano (Beirut), y el Chicago Latino Film Festival, entre otros.

Homenaje a las mujeres que han perdido un sueño

La cinta "Calzones rotos" es una adaptación de la novela del mismo nombre del escritor nacional Jaime Hagel Echenique. Valsecchi ya había utilizado uno de sus relatos en "Cuentos Chilenos" para televisión. Según el director, el título de esta película, además de ser el de la novela, tiene significados más profundos ya que "aunque también tiene que ver con los dulces chilenos, se trata también de la violencia masculina; y representa a las mujeres que han perdido algo en el camino, alguna ilusión, esa visión del futuro se les ha roto. Han perdido un sueño", señaló.

La historia, que transcurre en dos épocas: los años '20 y años '50, se ambienta en una casona. En ella viven sólo mujeres: Matilde, la matriarca, sus tres hijas solteras y la más joven, que es adoptada. Ellas son testigos y víctimas del machismo, época en que "estas conductas y sus consecuencias se ocultaban bajo una alfombra de secretos, que flotaban en el ambiente, pero de los que no se hablaba", enfatizó Valsecchi.
Para el director existen algunos conceptos claves que debe tener una comedia negra: "en este caso, es una película en la que la audiencia puede reírse y donde hay muertos. Es el sistema y el estilo que adoptó Jaime Hagel cuando escribió esta novela", agregó el realizador.

En el proceso de adaptación, la cercanía con el autor fue fundamental: "Soy un admirador de Jaime, me gusta su mundo, su estilo narrativo y lo encuentro sumamente cinematográfico", declaró el cineasta. "Lo que hicimos fue una adaptación bastante libre de una obra, para mi gusto, fabulosa", indicó.

El guion fue realizado por el propio Valsecchi junto a Valeria Vargas y tuvieron que enfrentar algunos desafíos como "reflejar de buena manera, las épocas concretas en las que ocurrieron estos hechos, que en el libro están elegantemente mezcladas. Y además queríamos mantener el estilo de Jaime en el salto de un periodo al otro", agregó el realizador. Para eso contó con el apoyo total del escritor: "Le anuncié a Jaime que iba a hacer algunos cambios fuertes a la historia y me dijo "esa es tu película, no es mi guion", señaló. En el estreno de la cinta, Jaime Hagel, sorprendido, le dijo a Valsecchi "no sabía que había escrito una historia tan buena", comentó el director.

La improvisación y las anécdotas como personajes cinematográficos

Antes de comenzar la filmación, el realizador había preparado un extenso documento donde precisaba de qué manera grabaría cada escena y plano. Pero, muchas veces, las cosas no suceden como se planifican. Cuando comenzó el rodaje, "vino alguien y me dijo 'filma lo que sientas, filma con el estómago y no con el computador'", confesó.

El largometraje, fue rodado íntegramente en la localidad de Calleuque (en la Región de O'Higgins), en una inmensa casona de gran valor patrimonial y arquitectónico. Como en toda grabación, sucedieron numerosas anécdotas, pero el cineasta recordó dos en particular: "el día de la filmación con los niñitos, llovía a cántaros. Al día siguiente, nos tocaba rodar la escena de la plaza. Me levanté a las seis de la mañana pensando ¿Qué hago si sigue lloviendo? Miro afuera y el cielo estaba celeste. Tuvimos que tapar el sol con unas banderas, para que chicas no se 'cocinaran'", señaló. Además, indicó que "esas sorpresas ocurren en el cine; Silvio (Caiozzi) contó la vez pasada (en la primera sesión del ciclo "Conversa conmigo") un milagrito que le ocurrió a él", agregó.

También compartió otro hecho particular que vivieron en el rodaje: "La casona no tenía piano y necesitábamos uno para una escena. Trajimos uno y el director de arte dijo 'pongámoslo aquí'; luego vino el dueño de la casa y exclamó '¡ahí teníamos el piano hace 40 años!', lo que nos dejó un poco sorprendidos", dijo Valsecchi.

En cuanto a las expectativas y ansiedad que experimenta un artista frente a su creación y al estreno de una película, el director señaló que "en un momento dudé si la película que había terminado de filmar era la que realmente había querido hacer. Pero la reacción del público me dijo 'quédate tranquilo'", sentenció.

Con respecto a sus próximos proyectos, el director señaló que tiene en mente un sueño: "Hay una película que me gustaría hacer, estoy tratando de escribir el guion, también está basada en una novela", confidencia. Aunque cree que la envergadura del proyecto lo hace imposible.

Con respecto a su participación en la tercera sesión de "Conversa Conmigo", Arnaldo Valsecchi agradeció a todos quienes formaron parte de la actividad y a quienes han visto "Calzones Rotos". Y envió un especial mensaje a quienes aún no lo han podido hacer: "ustedes están en pecado mortal, así es que por favor, apúrense y entren a la página web de Ondamedia y la podrán disfrutar", concluyó.

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