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La Facultad Eclesiástica de Teología se reunió para reflexionar y conocer el Reglamento que aborda el acoso, el hostigamiento y la discriminación arbitraria en la Universidad

Académicos, estudiantes, personal administrativo y de servicio de la Facultad, analizaron el documento emanado y aprobado desde el Consejo Superior de la PUCV.

24.05.2018

El doctor Juan Pablo Faúndez, jefe de programas académicos de la Facultad Eclesiástica de Teología, realizó una completa y acabada charla sobre la historia, gestación y escritura del Reglamento que aborda el acoso, el hostigamiento, la violencia y la discriminación arbitraria dentro de la Universidad.

Los citados documentos que consisten en una Política Institucional, un Reglamento frente a Denuncias y un Programa de Acciones de Sensibilización y Prevención relacionados con las temáticas de acoso, hostigamiento, violencia y discriminación arbitraria, fueron aprobados el martes 22 de mayo por el Consejo Superior de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso. 

El profesor Juan Pablo Faúndez destacó el hecho de que la Facultad Eclesiástica de Teología sea la primera unidad académica de la Universidad y una de las primeras en el país que se ha detenido a reflexionar, incluyendo a todos sus miembros, sobre una Política y un Reglamento que abordan estas temáticas dentro de una casa de estudios superiores. La charla se efectuó el pasado miércoles 23 de mayo y contó con la presencia de académicos, estudiantes, personal administrativo y de servicio de la Facultad.

“Fue un ejercicio de reflexión universitaria laudable porque participaron los tres estamentos de la Universidad de manera representativa. Alumnos, administrativos y profesores conocieron este Reglamento cuyos lineamientos propician una cultura organizacional en base al respeto, la dignidad y el reconocimiento de los valores y principios que se deben cultivar en todos los estamentos de la PUCV”, concluyó el doctor.

Sobre el Reglamento

Como ha sido de conocimiento público, la propuesta inicial de la Política Institucional y el Reglamento fue elaborada por una comisión que estuvo conformada por académicos de distintas carreras, y por representantes de los dos sindicatos de trabajadores y de la Federación de Estudiantes de la Universidad.

Entre los aspectos abordados en los documentos que serán publicados y distribuidos en la web y en diversas locaciones de la Universidad, se destaca que todo integrante de la comunidad universitaria que se considere víctima o testigo de hechos que puedan constituir acoso sexual, discriminatorio o psicológico; hostigamiento, violencia de género o discriminatoria; o discriminación arbitraria, podrá presentar en cualquier momento la o las denuncias respectivas. Incluso, los hechos ocurridos con anterioridad a la entrada en vigor de este Reglamento y que sean motivo de reproche, podrán ser reconducidas para que en relación a aquellos rijan las disposiciones normativas promulgadas con anterioridad y que ya han sido aplicables en otros casos que han sido sancionados.

Las denuncias serán recibidas y resueltas por una comisión cuyos integrantes pertenecerán a los distintos estamentos que componen la Comunidad Universitaria –académicos, trabajadores y estudiantes-, quienes fallarán en primera instancia. Por su parte, la investigación de las denuncias será de responsabilidad de un fiscal perteneciente a la Prosecretaría General de la PUCV. En caso de acontecer apelación, ésta será conocida por el Consejo Superior.

Asimismo, se establecen medidas de protección y acompañamiento para las partes involucradas en la denuncia, con la finalidad de que la Universidad disponga de los recursos humanos y profesionales que se requieran según el caso.

El Consejo Superior autorizó la entrada en vigor inmediata del documento, decisión que confirma el tratamiento prioritario que este órgano dio a estas materias. Como se indicó en su momento, y dado lo urgente de contar con estas herramientas de actuación institucional, la aprobación se realizó en el menor tiempo posible, cuidando el proceso justo y garantizando los derechos fundamentales de todas las partes involucradas.

En este contexto, la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso se transforma en una de las pocas Instituciones de Educación Superior del país que cuenta con una Política Institucional y un Protocolo que le permitirá abordar de un modo más robusto las denuncias sobre acoso, hostigamiento, violencia y discriminación arbitraria.

 

Natalia Cabrera, Facultad Eclesiástica de Teología

Dirección General de Vinculación con el Medio