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02 de julio, 2024

“Mi otro mundo”: El joven talento de BETA PUCV que diseña arquitectura del futuro

Tomás Órtiz sostiene en su mano uno de sus planos, donde se aprecia una ciudad con altos edificios y banderas. Con el sueño de estudiar Arquitectura en la PUCV, Tomás se prepara para rendir la PAES este año, mientras sus obras ya comienzan a ser admiradas por el público. 

Era verano del año 2020 cuando Tomás Órtiz Lecaros ingresó por primera vez a una sala de clases del Programa BETA PUCV. Los padres del estudiante habían estado buscando alternativas educativas que atendieran las demandas y necesidades de su hijo, por referencia de sus profesores: el sistema educacional tradicional no daba a basto con la excepcionalidad de Tomás. Fue así como conocieron, a través de las redes, al programa de la Dirección General de Vinculación con el Medio, y su Dirección de Inclusión. 

“En el colegio el profesor jefe me dijo que tratara de buscar otras opciones para él” explica Yanina Lecaros Melo, madre de Tomás, respecto a los inicios del joven estudiante en la PUCV, “Comenzó a llamar la atención, tenía intereses restringidos, fuera del común de la edad de sus pares”. Hoy, el joven que cursa su último año en el Programa, sigue sorprendiendo a las personas con sus planos: en aquel papel plasma las ciudades y su proyección futura, en conciencia y consideración a la crisis climática. 

Hoy, a sus 17 años y ad portas de salir de cuarto año medio, Tomás cuenta en su historial con exposiciones artísticas en donde fue protagonista, como la exposición “Mi otro Mundo” en el Centro Cultural Gabriela Mistral de Villa Alemana, o su asistencia a establecimientos educacionales. Además, ya está en sus planes realizar actividades en el Hospital Gustavo Fricke, requerido por su neuróloga, en busca de concientizar sobre el autismo, neurodivergencia diagnosticada en él. En estas instancias, la comunidad se ha reunido a admirar sus piezas, realizadas en un block que lo acompaña en su día a día. 

“Desde niño, me regalaron bloques, cosas con las que hacía ciudades” explica Tomás, quien encontró en el dibujo un espacio para desarrollar sus habilidades. “Cuando comencé a dibujar eran muy simples, típico de cualquier niño, pero no me detuve, lo hice una y otra vez hasta que finalmente comencé a practicar y salió” explicó el joven, que con consciencia social y ambiental, diseña urbanismo sustentable, que da respuesta a las problemáticas ambientales. 

“El dibujo me permitió tener más creatividad, varias explosiones continuas. Digo “ah, tengo una idea”, entonces quiero dibujarlo” explicó el estudiante, quien ahora ya piensa cómo diseñar países en base a lápiz y papel. 

Valeria Paz Fuentes, Coordinadora de BETA PUCV ha sido testigo del crecimiento y desarrollo de las potencialidades del joven, participando como asistente en sus exposiciones, destacándose como un chico apasionado por sus ideas. “Desde que llegó al programa nos ha sorprendido con la creación de sus planos de edificios y ciudades en donde propone una serie de alternativas y soluciones desde una mirada socioeconómica, siempre piensa en cada detalle, además suele estar inspirado en algún lugar existente y potenciar la identidad del espacio en su propuesta” destacó la profesional de la Dirección. 

El legado BETA PUCV en su formación y futuro 

Ya son cuatro años los que lleva Tomás en el Programa de la Dirección de Inclusión, una etapa que ha sido clave en su desarrollo. Yanina, su madre, lo resume como “lo mejor que nos ha pasado, para él sí o sí debe ser parte de BETA, que ha sido de gran ayuda y orientación”, algo en lo que coincide el estudiante. 

“Siento que el sistema educativo de Chile debería aprender del Programa BETA, porque es un sistema perfecto (...) Yo he aprendido muchas cosas distintas sólo por querer intentar algo nuevo: italiano, sobre astronomía, muchos gustos que han quedado para el resto de mi vida. También he conocido a muchos amigos, siento que te acerca a personas de tu gusto y creo que eso es lo más maravilloso del BETA; es un ambiente sano para aprender, para divertirse, para ser tú mismo” sostuvo Tomás. 

En cuanto a su futuro, siempre ha estado claro de lo que desea para su vida: estudiar Arquitectura en la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso. “Sin dudas esta es una de las mejores oportunidades, acá de verdad puedo aprender”, compartió Tomás, quien mantiene más que nunca el anhelo de estudiar en la PUCV comprendiendo la arquitectura como un elemento central en la sostenibilidad, innovación y el mundo del futuro. 

Desde la Dirección de Inclusión, la Directora Jacqueline Paéz Herrera, destaca los logros del joven estudiante, con un “profundo orgullo de su trabajo, dedicación y pasión. Nuestra Universidad, de excelencia, destaca por entregar herramientas para que sean agentes de cambio para una sociedad más equitativa y sustentable, y confiamos en que él, con su mirada tan crítica, aguda, y las habilidades que ha podido desarrollar gracias al trabajo del gran equipo de profesionales de BETA, lo logrará”.