El año 2019 la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso fue una de las casas de estudios superiores pioneras en el país al crear un Protocolo de Uso de Nombre Social y/o Cambio de Nombre Registral, alojado en el Programa de Diversidad de Género, que nació gracias a un trabajo en el que tuvo un importante papel la Federación de Estudiantes.
Rectoría se ha preocupado de generar avances en la materia, como es la creación de la Dirección de Equidad de Género, dependiente de la Vicerrectoría de Desarrollo, que en la actualidad tiene a su cargo este Protocolo.
Su directora, Yesika Herrera Soto explicó que “las instituciones requieren alinearse para responder a la garantía de derechos que el Estado chileno se ha comprometido y, en ese sentido, tenemos la responsabilidad de generar los dispositivos, políticas, programas y reglamentos para que las normativas y los grandes principios que nos orientan en equidad e igualdad puedan concretarse. La Dirección de Equidad de Género tiene un papel importante, pero no puede ser la única unidad que se haga cargo. Es vital que la transversalización del género sea asumida por todas las direcciones, facultades, unidades académicas y cada uno y una de sus integrantes. Tenemos un gran desafío y la Política Integral de Género será un medio para avanzar hacia nuestra responsabilidad como cogarante de derechos para estudiantes que se encuentren en procesos de transición identitaria por género, asegurando igualdad de géneros al interior de la comunidad universitaria”.
Respecto al camino avanzado en la generación de la institucionalidad, la académica reconoció que es momento de reconstruir confianzas a partir de los errores que se puedan haber cometido. “Corresponde pedir disculpas a quienes se hayan sentido poco escuchados/as o no hayan encontrado respuesta a sus requerimientos”, complementó.
¿CÓMO FUNCIONA?
Emma Echeverría, psicóloga del Programa de Diversidad de Género, destacó el esfuerzo realizado por la Universidad para sistematizar el procedimiento para el uso y reconocimiento del nombre social de estudiantes.
“Tiene que ver con la posibilidad de que puedan manifestar su voluntad de ser reconocidos y reconocidas en su comunidad universitaria por compañeros, compañeras y autoridades académicas respecto a su propia identidad, de cómo se reconocen y cómo quieren ser nombrados”, indicó la profesional.
Sobre el funcionamiento del Protocolo, explicó que inicialmente se reúnen con la persona que desea hacer uso y reconocimiento de su nombre social en la comunidad universitaria, quien plantea su situación, se analiza en conjunto la solicitud e información sobre el protocolo, y firma un acta que establece los alcances.
“Esto está relacionado con el trato directo en otro tipo de actividades, incluso más formales de su unidad académica o de la Universidad, donde ellas y ellos pueden ser considerados y que puede traducirse en el ser nombrados frente al público general y a que sus profesores y profesoras tengan conocimiento de la transición identitaria en la que se encuentran”, agregó.
Comentó que, complementariamente, toman contacto con las direcciones implicadas -Procesos Docentes, Asuntos Estudiantiles, Sistemas de Bibliotecas, Finanzas, y Deportes y Actividad Física-, y con los programas que tienen trato directo con estudiantes, “para que puedan estar en conocimiento de que la o el estudiante quiere ser llamado de acuerdo con su identidad”.
Más información sobre el Protocolo en https://www.daepucv.cl/protocolonombresocial
AVANCES
Variados han sido los avances y aportes realizados por la Universidad en el último tiempo, que han permitido robustecer la labor realizada a partir del Protocolo de Uso de Nombre Social. En este ámbito, destaca el establecimiento de un convenio de colaboración, desde Bienestar Estudiantil, con la Fundación Meridiana, la cual posee el centro interdisciplinario “DiverSalud” para atender a estudiantes de la Universidad en los ámbitos médico y psicológico.
Asimismo, y abordando una aspiración que existía desde la Federación de Estudiantes y del grupo Diversidad PUCV de avanzar más en los registros institucionales cuando las y los estudiantes solicitan la activación del Protocolo, la Universidad le dio prioridad a la iniciativa de incorporar en el Navegador Académico el nombre social, instancia que involucró el trabajo mancomunado de las direcciones de Servicios de Informática y Comunicaciones (DSIC), Procesos Docentes y de Equidad de Género, y que fue positivamente valorado por la FEPUCV.
Por su parte, el director de la DSIC, Marcos Jeldres, expresó que la implementación del nombre social en el Navegador Académico, Aula Virtual y cuentas Gmail, representó un desafío en materia de implementación, ya que era una necesidad ampliamente esperada para la comunidad universitaria.
“El equipo de la DSIC que se conformo para esta iniciativa, estableció dos fases para abordar este tema donde la primera de ellas consistía en habilitar el nombre social en aquellos módulos y reportes del navegadorque tuvieran mayor utilización académica, cuyo trabajo fue planificado y abordado en 15 días, dado el compromiso asumido con la Rectoría, lo que se encuentra implementado y marca todo un hito en el contexto de equidad de género al interior de la PUCV. La segunda fase, se encuentra en plena ejecución, cuyo trabajo debería finalizar a mediados de diciembre”, explicó.
Complementariamente, el área de Servicio Social ha recibido a las y los alumnos derivados desde Bienestar Estudiantil, entregándoles apoyo económico a quienes así lo necesiten.
Dirección de Comunicación Estratégica