El desarrollo de las habilidades en niños se ve potenciada con el uso de ciertos juegos de mesa, dado que trabajan elementos como la concentración, la imaginación y el trabajo en equipo. Del mismo modo, los pone ante situaciones donde deben tomar decisiones y trabajar en el desarrollo de diferentes estrategias para lograr objetivos.
Carolina Ezquer, es Bióloga Marina y actualmente se encuentra cursando el Magíster en Didáctica de las Ciencias de la PUCV, donde se adjudicó el proyecto Fondef VIU, “Preguntas exploradoras: el primer juego de mesa para enseñar y fortalecer la capacidad de construir preguntas investigables”.
El juego fue pensado para personas entre 12 y 14 años, aunque podría extenderse a universitarios en el futuro.
¿Cómo surgió esta idea?
“Nació a raíz de una necesidad. Hacerse preguntas es algo innato, sin embargo, es una habilidad que no se está trabajando y que en consecuencia se va atrofiando a medida que crecemos. Con el tiempo cada vez nos preguntamos menos cosas, nos cuestionamos menos cosas. El resultado de eso es un mundo infestado de fake news y creencias alternativas que dañan a la sociedad. En la ciencia hacerse preguntas es fundamental, pero para lograr que estas preguntas sean buenas debemos aprender a construirlas y trabajar sobre esta capacidad”.
¿En qué consiste el juego?
“´Preguntas Exploradoras´ es un juego de mesa educativo en donde los jugadores tienen que asumir el rol de un investigador o investigadora para poder hacerse preguntas sobre el mundo que les rodea. Gana aquel equipo que logre ir mejorando turno a turno su pregunta de investigación, para obtener finalmente una pregunta que sea lo suficientemente buena e interesante como para ser investigada”.
¿Cómo aprenden los niños mediante el juego?
“El juego es una actividad innata que nos lleva a adquirir muchos aprendizajes a lo largo de nuestra vida. En este ambiente lúdico se proporciona un espacio ficticio donde podemos probar y ejercitar actitudes y habilidades de todo tipo de una forma segura, sin consecuencias en la vida real. Por lo tanto, a través de jugar con otros aprendemos a sociabilizar, a conocer nuestros límites, a probar posibilidades y a pretender ser personajes para ver ´cómo sería´”.
En “Preguntas Exploradoras” la invitación es a que los niños y niñas se conviertan en investigadores e investigadoras y adquieran habilidades científicas de una forma fácil, entretenida y social.
Con este tipo de proyectos se busca mejorar la capacidad de cuestionamiento de niños y niñas, desarrollando la capacidad de hacer más y mejores preguntas sobre el mundo que les rodea y potenciando habilidades sociales y el pensamiento lógico.
Por Miguel Gasson
Facultad de Ciencias